El primer destino

Hola a todos, hoy os traigo nuestro primer viaje: Berlín.

    Todo comenzó desde la estación de tren de Vva. de Córdoba donde desde allí cogimos un tren que nos llevó a Madrid. El tren nos costó 23€ por persona. Cuando estábamos por la mitad del viaje vimos que había un señor que roncaba mucho. La verdad fue muy divertido.
    Pasaron 3h y por fin el tren nos dejó en la estación de Atocha (Madrid). Allí cogimos el metro que nos dejó en Barajas, que es el aerupuerto de Madrid. Bajamos del tren estubimos 1 h 30 min esperando que las maletas vinieran. Toda esa 1 h 30 min nos dio tiempo a dormir un poco. Cuando despertamos vimos que la policia estaba arrestando a un joven.
    Por fin el reloj marcaba 15:30 y nos levantamos del banco para cargar las maletas al avión. Veíamos que tardaban mucho en cargar las maletas, así que nos paramos a tomar un café. A las 15:50 nos acercamos al avión y nos dijeron que subieramos. El avión empezó a moverse asi que sabíamos que íbamos rumbo a Berlín. Justo cuando estabamos ya volando me asusté un poco por la altura. Yo estaba muy enfadado porque había un niño detrás mia que le estaba pegando patadas a mi asiento. ¡Por fin el avión paró en Schonefeld! Cuando mi compañero y yo bajamos del avión nos pusimos muy contento al saber que estabamos por primera vez en Berlín. Cogimos un autobús para ir al hotel porque estaba demasiado lejos. Llegamos al hotel llamado Sylter Hof. Yo aluciné de lo grande que era. Entramos y tenía de todo (restaurante, comedor, sala de reuniones...) Entramos a nuestra habitación y era muy bonita. Era raro que tuviera una tele muy cara. Las camas eran muy cómodas y la habitación muy acogedora. Terminamos de bajar las cosas de la maleta y bajamos al restaurante. Allí nos trataron muy bien y nos invitaron a postres. Yo me pedí una especie de chorizo con patatas. Estaba muy rico.

      Subimos a nuestra habitación y nos acostamos.
      Al día siguiente volvimos a bajar  a desayunar unos buenos y grande dulces. Mi compañero me preguntó que salíamos a la calle y yo acepté. Salimos a ver distintos monumentos y a ver como era la gente. Yo cogí el móvil y busqué por donde se iba al muro y a la columna de la victoria. En el muro vimos que un niño se subió al muro y finalmente se cayó. Yo me reí mucho, aunque no fuera para reirse. Luegos llegamos a la Columna de la Victoria. Era muy alta y había mucha gente. Cuando volvíamos nos encontramos co un gran monumento, que era la catedral de Berlín.




      Entramos y había un coro cantando. No me podía resistir a echarle un dinerillo, así que se lo eché. Volvimos al hotel y nos enteramos de que cerca estaba el gran zoo. Fuimos a visitarlo y había unos monos que si le dabas un plátano se enamoraba de ti. Era muy extraño lo que estaba ocurriendo en Berlín. Lo que más me gustó fue el acuario. Había tiburones y muchas especies de peces. Estuvo muy bien. Volvimos al hotel y nos acostamos muy cansados porque andamos mucho aquel día.

      Al día siguiente cogimos un tren que nos llevó a Hamburgo para hacer un recorrido por la ciudaduda. Allí en Hamburgo visitamos el Imtech Arena (estadio), al río Alster y uno de los más conocidos que era Bismarck.














 
     Regresamos a Berlín y recogimos todo para que al día siguiente nos fueramos a una ciudad de Asia.
     Ese fue todo nuestro viaje en Berlín.